Un rayo de esperanza

CRAIG MURRAY

Al encontrar que existe un caso plausible contra Israel, la Corte Internacional de Justicia trató con desprecio el argumento de Israel de que el caso debería ser desestimado, ya que está ejerciendo su derecho de legítima defensa. Este argumento ocupó más de la mitad de los alegatos de Israel. El tribunal no sólo consideró que existía un caso plausible de genocidio, sino que sólo mencionó la legítima defensa una vez en su sentencia provisional, y fue simplemente para señalar que Israel la había reclamado. Párrafo 40:

En cualquier caso, Israel sostiene que, puesto que la finalidad de las medidas provisionales es preservar los derechos de ambas partes, el Tribunal debe, en el presente caso, considerar y «equilibrar» los respectivos derechos de Sudáfrica e Israel. La Demandada subraya que tiene la responsabilidad de proteger a sus ciudadanos, incluidos los capturados y mantenidos como rehenes como resultado del ataque que tuvo lugar el 7 de octubre de 2023. En consecuencia, alega que su derecho a la legítima defensa es fundamental para cualquier evaluación de la situación actual.

Que la CIJ no haya afirmado el derecho de Israel a la autodefensa es quizá el punto más importante de esta resolución provisional. Es el perro que no ladró. El argumento que todos los líderes occidentales han estado utilizando ha sido rechazado por la CIJ.

La CIJ no repitió que una potencia ocupante no tiene derecho a la autodefensa. No era necesario. Simplemente, ignoró la engañosa afirmación de Israel.

Pudo hacerlo porque lo que reiteró iba mucho más allá de cualquier afirmación plausible de legítima defensa. Lo que más me sorprendió de la sentencia de la CIJ fue que el auto entraba en muchos más detalles sobre las pruebas de genocidio de lo que era necesario. Su descripción era descarnada.

El párrafo 46 es crucial:

46. El Tribunal observa que la operación militar llevada a cabo por Israel tras el ataque
del 7 de octubre de 2023 ha provocado un gran número de muertos y heridos, así como la destrucción masiva de viviendas, el desplazamiento forzoso de la inmensa mayoría de la población y grandes daños a las infraestructuras civiles. Aunque las cifras relativas a la Franja de Gaza no pueden verificarse de forma independiente, información reciente indica que 25.700 palestinos han muerto, más de 63.000 han resultado heridos, más de 360.000 viviendas han sido destruidas o parcialmente dañadas y aproximadamente 1,7 millones de personas han sido desplazadas internamente (véase la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCAH), Hostilidades en la Franja de Gaza e Israel, impacto reportado, Día 109 (24 de enero de 2024)).

La razón por la que esto es tan crucial es que el Tribunal no está diciendo que Sudáfrica afirme esto. El Tribunal está diciendo que estos son los hechos. Es una constatación de los hechos por parte del Tribunal. No puedo insistir demasiado en la importancia de esta descripción del Tribunal sobre la situación en Gaza.

A continuación, el Tribunal detalla los relatos de las Naciones Unidas sobre la situación de hecho, citando a tres altos funcionarios diferentes, incluido Philippe Lazzarini, Comisionado General de la UNRWA:

49. El Tribunal toma nota además de la declaración emitida por el Comisionado General del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (UNRWA),  Sr. Philippe Lazzarini, el 13 de enero de 2024:

«Han pasado 100 días desde que comenzó la devastadora guerra, matando y desplazando a personas en Gaza, tras los horribles ataques que Hamás y otros grupos llevaron a cabo contra la población de Israel. Han sido 100 días de calvario y ansiedad para los rehenes y sus familias.
En los últimos 100 días, los bombardeos sostenidos en toda la Franja de Gaza han provocado el desplazamiento masivo de una población que se encuentra en un estado de flujo, constantemente desarraigada y obligada a marcharse de la noche a la mañana, sólo para trasladarse a lugares igual de inseguros. Este ha sido el mayor desplazamiento del pueblo palestino desde 1948.
Esta guerra ha afectado a más de 2 millones de personas, toda la población de Gaza.
Muchos llevarán cicatrices de por vida, tanto físicas como psicológicas. La gran mayoría, incluidos los niños, están profundamente traumatizados.
Los refugios de la UNRWA, superpoblados e insalubres, se han convertido en el «hogar» de más de 1,4 millones de personas.
Carecen de todo, desde comida hasta higiene e intimidad. La gente vive en condiciones inhumanas, donde las enfermedades se propagan, incluso entre los niños. Viven en lo invivible, con el reloj avanzando rápidamente hacia la hambruna. La situación de los niños en Gaza es especialmente desgarradora. Toda una generación de niños está traumatizada y tardará años en curarse. Miles han muerto, mutilados y huérfanos. Cientos de miles están privados de educación. Su futuro está en peligro, con consecuencias de largo alcance y duraderas». (UNRWA,  «Gaza: 100 días de muerte, destrucción y desplazamiento», Declaración de Philippe Lazzarini, Comisionado General de UNRWA, 13 de enero de 2024).

Esto explica, por supuesto, por qué la respuesta inmediata a la sentencia de la CIJ fue un ataque coordinado de Israel y las potencias imperialistas combinadas contra la UNRWA, diseñado para acelerar el genocidio mediante la interrupción de la ayuda, para proporcionar una contra-narrativa propagandística a la sentencia de la CIJ, y para reducir la credibilidad de las pruebas de la UNRWA ante el tribunal.

El Tribunal trabaja muy estrechamente con la ONU y es una parte muy arraigada del sistema de la ONU. Tiene una relación particularmente estrecha con la Asamblea General de la ONU – muchos de los casos del Tribunal se basan en peticiones de la Asamblea General de la ONU. Dentro de quince días, el Tribunal iniciará sus audiencias de fondo sobre la situación jurídica en los Territorios Ocupados de Palestina, a petición de la Asamblea General. Hay cinco referencias específicas a la AG en la Orden.

El Tribunal dedicó mucho tiempo a esbozar los hechos del genocidio que se está desarrollando en la Franja de Gaza. No tenía por qué hacerlo con tanto detalle, y se le ha prestado muy poca atención. También me sorprendió el grado de detalle con el que el Tribunal expuso las pruebas de la intención genocida de Israel.

Es especialmente humillante para Israel que el Tribunal citara al Jefe de Estado israelí, el propio Presidente de Israel, como prueba clara de la intención genocida, junto con otros dos ministros del gobierno.

51. A este respecto, el Tribunal ha tomado nota de una serie de declaraciones efectuadas por altos funcionarios israelíes. Llama la atención, en particular, sobre los siguientes ejemplos.

52. El 9 de octubre de 2023, el Sr. Yoav Gallant, Ministro de Defensa de Israel, anunció que había ordenado un «asedio total» de la ciudad de Gaza y que no habría «ni electricidad, ni alimentos, ni combustible» y que «todo [estaba] cerrado». Al día siguiente, el ministro Gallant declaró, dirigiéndose a las tropas israelíes en la frontera de Gaza:

«He liberado todas las restricciones. . . Habéis visto contra qué estamos luchando. Estamos luchando contra animales humanos. Este es el ISIS de Gaza. Esto es contra lo que estamos luchando. . . Gaza no volverá a ser lo que era antes. No habrá Hamás. Eliminaremos todo. Si no toma un día, tomará una semana, tomará semanas o
incluso meses, llegaremos a todos los lugares».

El 12 de octubre de 2023, el Sr. Isaac Herzog, Presidente de Israel, declaró, refiriéndose a Gaza:

«Estamos trabajando, operando militarmente según las normas del derecho internacional. Inequívocamente. Es toda una nación la responsable. No es cierta esta
retórica de que los civiles no son conscientes, no están implicados. Es absolutamente falsa. Podrían haberse levantado. Podrían haber luchado contra ese régimen malvado que se apoderó de Gaza en un golpe de estado. Pero estamos en guerra. Estamos en guerra. Estamos en guerra. Estamos defendiendo nuestros hogares. Estamos protegiendo nuestros hogares. Esa es la verdad. Y cuando una nación protege su
hogar, lucha. Y lucharemos hasta romperles el espinazo».

El 13 de octubre de 2023, el Sr. Israel Katz, entonces Ministro de Energía e Infraestructuras de Israel, declaró en X (antes Twitter):

«Lucharemos contra la organización terrorista Hamás y la destruiremos. A toda la población civil toda la población civil de Gaza se le ordena marcharse inmediatamente. Ganaremos. No recibirán una gota de agua ni una sola pila hasta que abandonen el mundo».

Una vez más, no se trata de que el Tribunal diga que Sudáfrica ha alegado esto. Es una constatación de los hechos por parte del Tribunal. La CIJ ya ha declarado falsa la negación de Israel ante el tribunal de incitación al genocidio.

Ahora piensen en esto: al día siguiente de que el presidente Herzog hiciera una declaración genocida, tal como determinó la Corte Internacional de Justicia, se reunió y recibió el «pleno apoyo» de Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y Roberta Metsola, presidenta del Parlamento Europeo.

Cuando se toman los detalles de lo que la CIJ ha considerado que son los hechos reales del caso, en muerte y destrucción y en intención, no tengo ninguna duda de que se trata de un tribunal que actualmente está dispuesto a declarar a Israel culpable de genocidio una vez que el caso sustantivo llegue a la Corte.

Todos los argumentos de Israel se vieron derrotados. Todos. El gran esfuerzo que Israel hizo para que se desestimara el caso por motivos procesales fue deshechado. También la legítima defensa. Y en sus conclusiones sobre los hechos, el Tribunal declaró manifiestamente falsas las mentiras israelíes sobre la prevención de víctimas civiles, la responsabilidad de Hamás por los daños a las infraestructuras y el acceso de la ayuda humanitaria a Gaza.

70. El Tribunal considera que la población civil de la Franja de Gaza sigue siendo extremadamente vulnerable. Recuerda que la operación militar llevada a cabo por Israel después del 7 de octubre de 2023 ha tenido como resultado, entre otras cosas, decenas de miles de muertos y heridos y la destrucción de viviendas, escuelas, instalaciones médicas y otras infraestructuras vitales, así como desplazamientos a escala masiva (véase el párrafo 46 arriba). El Tribunal observa que la operación continúa y que el Primer Ministro de Israel anunció el 18 de enero de 2024 que la guerra «durará muchos largos meses más». En la actualidad, muchos palestinos en la Franja de Gaza no tienen acceso a los alimentos más básicos, agua potable, electricidad, medicamentos esenciales o calefacción. 

Estos son los hechos de lo que ocurrió.

No se dejen confundir por la ausencia de la palabra «alto el fuego» en la orden del Tribunal. Lo que el Tribunal ha ordenado está muy cerca de eso. Ha ordenado explícitamente al Ejército israelí que deje de matar palestinos.

EL TRIBUNAL,
Indica las siguientes medidas provisionales:

(1) Por quince votos contra dos,

El Estado de Israel, de conformidad con sus obligaciones en virtud de la Convención sobre la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, en relación con los palestinos de Gaza, tomará todas medidas a su alcance para impedir la comisión de todos los actos comprendidos en el ámbito del artículo II de esta Convención, en particular:

(a) matar a miembros del grupo
(b) causar lesiones corporales o mentales graves a los miembros del grupo;
(c) someter deliberadamente al grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial; y física total o parcial del grupo; y (d) imponer medidas destinadas a impedir los nacimientos en el seno del grupo;

A FAVOR: Presidente Donoghue; Vicepresidente Gevorgian; Jueces Tomka, Abraham, Bennouna, Yusuf, Xue, Bhandari, Robinson, Salam, Iwasawa, Nolte, Charlesworth, Brant;
Juez ad hoc Moseneke;
EN CONTRA: Juez Sebutinde; Juez ad hoc Barak;

(2) Por quince votos contra dos,

El Estado de Israel garantizará con efecto inmediato que sus militares no cometan ninguno de los actos descritos en el punto 1 anterior;

A FAVOR: Presidente Donoghue; Vicepresidente Gevorgian; Jueces Tomka, Abraham,
Bennouna, Yusuf, Xue, Bhandari, Robinson, Salam, Iwasawa, Nolte, Charlesworth, Brant; Juez ad hoc Moseneke;

EN CONTRA: Juez Sebutinde; Juez ad hoc Barak;

(3) Por dieciséis votos contra uno,

El Estado de Israel tomará todas las medidas a su alcance para prevenir y castigar la 
incitación directa y pública a cometer genocidio en relación con los miembros del grupo palestino en la Franja de Gaza;

A FAVOR: Presidente Donoghue; Vicepresidente Gevorgian; Jueces Tomka, Abraham,
Bennouna, Yusuf, Xue, Bhandari, Robinson, Salam, Iwasawa, Nolte, Charlesworth, Brant; Jueces ad hoc Barak, Moseneke;
EN CONTRA: Juez Sebutinde;

Eso está absolutamente claro. Y aunque acepto que es tautológico, en el sentido de que ordena a Israel que obedezca un Convenio que Israel ya está obligado a cumplir, no podría haber una indicación más clara de que el Tribunal cree que Israel no lo está obedeciendo actualmente.

Entonces, ¿qué pasa ahora?

Bien, Israel ha respondido matando a más de 180 civiles palestinos desde que se dictó la orden del Tribunal Internacional de Justicia. Si esto continúa, Sudáfrica podría volver a la Corte para pedir medidas más urgentes, incluso antes de que llegue el informe mensual ordenado a Israel. Argelia ha anunciado que llevará la Orden ante el Consejo de Seguridad de la ONU para que se aplique.

Dudo que Estados Unidos la vete. Israel y sus partidarios han reaccionado de forma esquizofrénica a la orden de la CIJ. Por un lado, la CIJ ha sido denunciada como antisemita. Por otro lado, la narrativa oficial ha consistido (increíblemente) en afirmar que Israel ganó realmente el caso, minimizando al mismo tiempo la cobertura en los principales medios de comunicación. Esto se ha visto reforzado por el ataque masivo y coordinado contra la UNRWA, para crear titulares alternativos.

Es difícil afirmar que Israel ha ganado y, al mismo tiempo, tratar de bloquear la aplicación de la orden del Consejo de Seguridad. Mi sospecha es que seguirá habiendo una doble vía: fingir que no hay genocidio y que Israel está obedeciendo la «innecesaria» orden, y al mismo tiempo atacar y ridiculizar a la CIJ y a la ONU en general.

Dijese lo que dijese la CIJ, Israel no habría detenido el genocidio; esa es la pura verdad. La reacción inmediata de Estados Unidos y sus aliados a la Orden ha sido intentar acelerar el genocidio paralizando la labor de ayuda de la ONU. Confieso que no esperaba algo tan despiadado y descarado.

Las ruedas de Dios muelen despacio, pero muelen muy poco. Al haber señalado la CIJ un posible genocidio de forma tan contundente, es muy posible que corresponda a los jueces de cada país frenar el apoyo internacional al genocidio. Como expliqué detalladamente, la Convención sobre el Genocidio ha sido incorporada a la legislación del Reino Unido por la Ley de la Corte Penal Internacional de 2001.

Sin duda alguna, los asesores jurídicos de la Foreign y Commonwealth Office (FCO) habrán emitido actas advirtiendo de que los ministros corren ahora el riesgo de incurrir en responsabilidad personal en virtud de la legislación británica por complicidad en genocidio, en caso de que continúen los envíos de armas y otras formas de cooperación militar y de inteligencia con el genocidio israelí. En Estados Unidos, ya han comenzado las vistas en California sobre una demanda por complicidad en genocidio interpuesta contra Joe Biden.

Por supuesto, me gustaría que todo esto funcionara más rápido. Pero no será así. La Asamblea General de la ONU puede suspender a Israel de la organización. Se pueden emprender otras acciones útiles. Pero se trata de un largo camino, no de una solución rápida, y personas como tú y yo seguimos teniendo un papel vital, como todo el mundo, a la hora de utilizar el poder del pueblo para arrebatar el control a una despiadada clase política de asesinos.

Esta ha sido una buena victoria. Me complace que este rumbo por el que abogué y presioné haya funcionado y haya aumentado la presión sobre los sionistas, y que mi juicio de que la Corte Internacional de Justicia no es sólo una herramienta de la OTAN como la corrupta Corte Penal Internacional, haya sido reivindicado.

No puede ayudar a los niños muertos y mutilados anoche ni a los que morirán en los próximos días. Pero es un rayo de esperanza en el horizonte.

Craig Murray es historiador, periodista y exdiplomático británico. Fue embajador del Reino Unido en Uzbekistán entre 2002 y 2004 y rector de la Universidad de Dundee (Escocia). Ha sido el único informador presente en el Palacio de la Paz de La Haya durante la vista de la demanda de Sudáfrica contra Israel. Su trabajo se puede seguir aquí.