Israel: democracia de nombre, no de esencia
EUGENIO GARCÍA GASCÓN
Tras las elecciones del 1 de noviembre, en las que se registró una victoria clara del bloque liderado por Benjamín Netanyahu, se ha abierto un áspero debate acerca de la naturaleza que puede adquirir el estado judío con el próximo gobierno. La victoria de la derecha ultranacionalista y de los partidos religiosos ultraortodoxos está alarmando a los ciudadanos de ideología laica y moderada, que se hallan en clara minoría y desde cuyas filas se augura un final para el peculiar sistema democrático existente desde el establecimiento de Israel en 1948.