Cuando «internacionalismo» se convierte en una palabra sucia
DANIEL LARISON
Mientras la primera potencia mundial se niegue a respetar los límites del derecho internacional, siempre será una fuerza desestabilizadora en el mundo y contribuirá a futuros conflictos. Un enfoque internacionalista del mundo basado en principios exige que Estados Unidos no sólo respete las leyes que espera que respeten los demás, sino que también se exija a sí mismo y a sus clientes el cumplimiento de las normas más estrictas. Cualquier intento de establecer excepciones o de crear lagunas jurídicas para EEUU y los estados alineados con él servirá para socavar el derecho internacional y fomentar más violaciones.